El nacimiento de Venus, cuadro realizado por el pintor renacentista Sandro Botticelli, una de las obras cumbre del maestro florentino y del Quattrocento italiano. Fue encargado por un miembro de la familia Medici alrededor del año 1485. Está ejecutado al temple sobre lienzo, mide 278,5 cm de ancho por 172,5 cm de alto y se conserva en la Galería Uffizi, en Florencia.
El tema, mitológico, representa a la diosa Venus nacida de la espuma del mar. Impulsada desde el oeste hacia la costa de su tierra natal, la isla de Chipre o Citera, por el dios del viento Céfiro quién sostiene a Cloris diosa de las flores. Ahí la espera una de las Horas, diosas de las estaciones, en este caso de la primavera. Que se prepara para vestirla con un manto de flores, mientras las rosas caen junto a Venus, ya que la tradición dice que surgieron con ella.
Según la interpretación de Ernst Gombrich, que nos ha cautivado, la obra representa la fusión simbólica del Espíritu y la Materia, la interacción armoniosa de idea y naturaleza. Parte del concepto de Humanitas, o Humanidad virtuosa.
Finalmente hay que mencionar que los dioses de la antigua religión romana se consideran paganos, lo que los convierte en materia obligatoria de estudio. Esta obra contiene todo lo que nos gusta; Enlaza distintas épocas, culturas y personajes históricos con temas tan diversos como el renacimiento y la religión. Por lo que hemos creado nuestra propia y humilde versión homenajeando a la diosa del amor y la belleza.
